Este año se celebra el centenario del nacimiento de uno de los grandes músicos y arreglistas que ha dado nuestro país. Juan García Esquivel, nació en Tamaulipas, inició su desarrollo creativo en la Ciudad de México y lo consolidó en Estados Unidos, en donde creó un nuevo género musical, el lounge o el bachelor pad music.
Su imagen quizá no es muy reconocida, pero sus lentes y su estilo sí, negros, de pasta, cuadrados, muy de los años 50; incluso una marca de lentes mexicana, que se anuncia en Facebook, nombró uno de sus armazones como él: “Esquivel”.
El mexicano Juan García Esquivel (Tamaulipas, 1918 - Morelos 2002), una de las mentes creativas detrás de todo un movimiento musical de los años 50, conocido como el space age batchelor pad music, o el space age pop music, o lo que conocemos también como lounge, además de pionero en la exploración y experimentación del sonido estereofónico, ha sido poco valorado y reconocido en nuestro país, ¿por qué?, lo ignoro, quizá porque fue un músico adelantado a su época y poco comprendido en nuestro país en su momento.
En enero de este año, el 20 para ser específicos, Esquivel -como era conocido en Estados Unidos-, celebró su centenario de nacimiento, sin mayor repercusión en nuestro país, lamentablemente. Desde los 14 años ya estaba sentado frente al piano tocando melodías para la XEW y cuatro años después ya dirigía, en la misma radiodifusora, una orquesta de 22 músicos.
Esquivel, lejos de lo que podría pensarse no estudió música formalmente, egresó de la Escuela Superior de Ingeniería Mecánica y Eléctrica (ESIME) del Instituto Politécnico Nacional, sin embargo sus ideas musicales fueron totalmente revolucionarias para la época. La instrumentación que desarrolló no tenía nada que ver con las orquestas tradicionales del momento. Cuando escuchas un arreglo de Esquivel, sabes de inmediato que él está detrás.
A finales de los años 50 se fue del país, contratado por la RCA Victor, e impulsado también porque no encontraba en los músicos mexicanos la complicidad para acompañar sus arreglos y su música. Fue allá en donde logró aterrizar la mayor parte de sus ideas. Abrevando de ritmos latinos y de elementos del jazz, Esquivel logró crear un sonido único y totalmente característico. Su piano, los metales, las percusiones (muchas), la guitarra estilo hawaiana (con slide), las voces femeninas haciendo coros y mucho sabor latino, son elementos permanentes en su música. Latin-esque es uno sus temas insignia, para conocerlo, al igual que Jornada Sentimental o Bulevard de los Sueños Rotos.
Además de los muchos discos que grabó y las decenas (¿centenas?) de arreglos que hizo a lo largo de su carrera, Esquivel además se destacó como compositor de música de varias miniseries estadounidenses, como Los Ángeles de Charlie y muchas más, que produjeron los Estudios Universal.
Cuando comenzaron a venderse reproductores de discos LP’s con sistema estereofónico -concepto que la gente no entendía-, la RCA Victor decidió comenzar a vender los aparatos acompañados de un disco de Esquivel, para que de esta forma las personas pudieran escuchar la estereofonía. Existe otra historia sobre el genio de Esquivel, en una ocasión tomó a dos orquestas, las metió a dos estudios distintos y las grabó tocando sus arreglos, de ese tamaño era la ambición y la visión musical de Juan García Esquivel.
Por todo lo anterior, cuando Manuel Huizar, uno de los líderes de la Orquesta Nacional de Jazz de México, me comentó que la agrupación trabajaba en un homenaje a Juan García Esquivel, me emocioné como niño en dulcería, ya que desde hace mucho tiempo soy un ferviente fan de su música.
“Esquivel 100 años” es el nombre del concierto que la Orquesta Nacional de Jazz de México prepara para el domingo 15 de julio a las 18:00 horas, en el Teatro de la Ciudad Esperanza Iris, en donde por primera vez, en mucho tiempo -y si me apuran, quizá la primera vez a secas-, una orquesta de músicos mexicanos interpretará la música y los arreglos de Juan.
Detrás del proyecto, además de Manuel Huizar, se encuentra Tim Mayer, de quien surgió la idea de celebrar el centenario del originario de Tampico, Tamaulipas, de esta manera. El concierto, además de 22 músicos en escena, contará con voces reconocidas de la escena jazzera mexicana como Iraida Noriega, Laura Itandehui, Suzanne Long y Persi Vignola Schacht. Cabe destacar que, como no existen las partituras de la obra de Juan García Esquivel, la orquesta ha tenido que trabajar en la transcripción de la música y los arreglos, para posteriormente montarlos con los músicos, trabajo titánico que ha requerido de toda la pericia y talento de los jóvenes músicos.
Indudablemente, así cómo su música, el concierto de la Orquesta Nacional de Jazz de México, será único e irrepetible, sería una lástima que se lo perdieran y peor que no disfruten de la música de un genio musical adelantado a su época, como lo fue Esquivel!
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